Trabajo producido por el GRIPSI, Departamento de Estudios Psicoanalíticos en SIDA en infecciones de transmisión sexual (ITS) en la subjetividad de la época; presentado en Jornadas CICBA del Instituto Clínico de Buenos Aires realizadas el 7 de Mayo en la sede de la Escuela de la Orientación Lacaniana (EOL).
Escriben: Liz Spett; Silvio Rivero; Luisina Rugilo; Javier Souto.Establecimiento de texto: Carlos Gustavo Motta
El GRIPSI es un grupo de trabajo que desde su inicio apuntó a la subjetividad de la época en relación a la temática del Complejo HIV-sida, tal como lo hemos llamado a partir de los aportes de la socióloga Gabriela Giannini y por las investigaciones realizadas a partir de 1987 en el Hospital Muñiz donde se trabajó con los 188 primeros casos de la pandemia del sida en nuestro país. 188 vidas partidas, producto de algo que no sabíamos que era y que el mundo rápidamente por sus prejuicios de orden sexual, lo desplazó a un grupo que condenó llamándolo promiscuo. Hasta que lo desplazado comenzó hacer ruido a un Para-Todos y allí la pandemia provocó la llamada "herida del mundo" término aplicado por el filósofo francés André Glucksman. El GRIPSI, luego de los trabajos de Danielle Silvestre fue el primer grupo americano que se ocupó del tema Psicoanálisis<>sida. Jacques-Alain Miller dio el apoyo inicial para la creación de este equipo de investigación en 1996 y que este año conmemora 20 años ininterrumpido de aportes a la comunidad. La transfiguración de la intimidad fue anunciada por Anthony Giddings y la utilización de la medicina antiretroviral comenzó a ocupar las investigaciones principales, transformando al HIV/sida en una enfermedad crónica. Sin embargo, ello no eliminó la discriminación sufrida a quienes conviven con el virus de HIV tal como debe denominarse de acuerdo a la terminología de ONUsida. Así se marca la convivencia del portador asintomático con el virus por un lado y el sida escrito con minúscula.
Quienes mejor que aquellas 188 personas para saber qué fue una vida de temprana partida.
Vidas partidas. Partidas alude a varias conceptualizaciones a tener en cuenta:
Partidas. En partes iguales o no. Algo se ha roto.
Partida. De algo nuevo. Se parte desde un punto para llegar a otro. Un nacimiento.
Sacar partido de la partida.
Experiencias compartidas. Tomemos otras, más allá del complejo HIV7sida, en este caso la de Primo Levi, sobreviviente de la Shoáh , quien luego de escribir y describir su estadía en el Lager, comete suicidio y la de Elli Wiesel, quien también pasó por el horror , escribió sobre ello y ganó un Premio Nóbel de la Paz en 1986. Podemos incluir al psicoanalista Bruno Bettelheim quien atravesó dos campos de concentración – Dacahu y Buchenwald desde 1938 hasta 1939, durante once meses, antes de la declaración de la Guerra. Se interesó por el autismo infantil. También se suicidó.
La idea para indagar es: El hecho catastrófico es esa irrupción de lo real en la vida de un Sujeto. Qué hace que no tenga el mismo peso en cada quién? Seguramente algo de su estructura anterior lo posibilita. Sin embargo, afirma Primo Levi y varios historiadores, el Láger convirtió la subjetividad en una cosa en una "res". Entonces qué de eso se vuelve a armar? Qué dice el Psicoanálisis al respecto?
Se trata en todos estos casos paradigmáticos de vidas partidas tal como venían siendo. Esa partición opera como un relanzamiento a otra cosa. (Sacar partido de esa terrible jugada). Según Norberto Bobbio : los campos de exterminio han sido no un acontecimiento más en la historia humana, sino EL ACONTECIMIENTO de la historia.
"Una casita blanca permanece en mi memoria, con esta casita blanca sueño todas las noches"…
Así cantaba Simón, uno de los dos supervivientes del campo de concentración Chelmno en Polonia, en el comienzo del documental "Shoah" de Claude Lanzmann. Este documental del año 1985, fue filmado durante casi diez años y tuvo la particularidad que se trato de entrevistas a modo de testimonios de personas, ya sean víctimas, verdugos o meros testigos del holocausto.
Cuenta Simón en la entrevista del documental que, los SS lo obligaban a cantar porque les gustaba su voz melodiosa, cantaba temas de su Polonia natal y el guardia que lo vigilaba le enseñaba canciones militares prusianas. Algo de esas canciones siguieron resonando en Simón, ese resonar que le permitió en ese momento trágico de su vida, saber hacer algo con aquello insoportable que estaba atravesando.
Ese resonar que en la entrevista para el documental le sirvió para reconocerse, como cuando en un momento de la filmación, llegan al lugar donde durante la guerra estuvo el campo de concentración y él dice "Difícil de reconocer… pero era aquí… aquí mataban gente". A partir de esta frase surge la pregunta acerca de lo difícil de reconocer. Reconocerse? Este reconocimiento implica un volver sobre lo conocido, y qué fue aquello conocido, quién fue aquello conocido. Talvez fue un volver a conocerse, un punto de partida, como si todo a partir de allí se resignificaría.
A partir de lo vivido en la Segunda guerra, debimos reconocer algo de lo humano en eso que dice Simón como "difícil de reconocer". Para Simón ese reconocerse partió desde eso que resonaba, una casita blanca con la que soñaba todas las noches. Algo de lo humano o del hombre? Como dice Unamuno en su libro "Del sentimiento trágico de la vida", "soy hombre, a ningún hombre estimo extraño. Porque el adjetivo humanus me es tan sospechoso como su sustantivo abstracto humanitas, la humanidad. Ni lo humano ni la humanidad, ni el adjetivo simple, ni el adjetivo sustantivo, sino el sustantivo concreto: el hombre. El hombre de carne y hueso, el que nace, sufre y muere – sobre todo muere-, el que come y bebe y juega y duerme y piensa y quiere; el hombre que se ve y a quien se oye, el hermano, el verdadero hermano." (Unamuno, 2014). Unamuno en su libro tratará de hacernos reflexionar sobre la esencia del hombre y su posición frente a la muerte, como dirá Eric Laurent en una conferencia a raíz de la presentación de su libro "El sentimiento trágico de la vida": "Unamuno trataba de dar vida a un movimiento ético moral en nombre de la finitud de la existencia…lo que llevaba a la guerra era precisamente la falta de moralidad de la época…la gente se hacía tomar por el consumo y veía esta desaparición del sentimiento auténtico de la vida que incluye la presencia de la muerte…un ser para la muerte que podía por lo menos frenar el surgimiento en lo real de la muerte y de la guerra.". (Laurent, 2011)
Simón a partir de su canción encuentra un saber hacer con lo Real de la muerte, con aquello indecible, con aquello imposible de representar. Algo resuena en el cuerpo de Simón, algo del goce, el placer del canto y la cercanía con la muerte.
Mikael Podchlenik, el otro superviviente del campo de concentración Chelmno cuenta en su entrevista, en el documental : "Todo murió (en Chelmno)…uno es más que un hombre… entonces hay que olvidar…agradezco a Dios lo que quedo y que olvidé y que no se hable de eso…" ,luego continúa diciendo "Estaba prohibido usar las palabras víctima o muerto, porque eso era exactamente como un taco de madera, que eso era pura mierda, que eso no tenía ninguna importancia, que no era nada…los alemanes nos obligaban a decir…que se trataba de figuren, es decir de marionetas, de muñecas".
Para Mikael a partir de Chelmno también se establece un punto de partida, él dice que "todo murió" en Chelmno y sigue diciendo "uno es más que un hombre", siguiendo a Unamuno podríamos decir que un Hombre es un hermano, un padre y el que sobre todo muere. Quizás para Mikael algo del hombre, de lo humano murió en Chelmno.
Mikael prosigue diciendo "entonces hay que olvidar", ahora bien, sabemos que para olvidar es necesario recordar, no podemos olvidar algo que no recordemos, pero si eso a recordar resulta insoportable… Si todo murió para Mikael, qué queda, talvez ser algo más que un hombre si el hombre era el verdugo, quizás sea mejor ser una marioneta. Mikael supo saber hacer con eso insoportable y se transformó en lo que quedo…una marioneta.
Hoy en día estamos atravesados por un discurso que se dirige al Todo y ese todo implica que no hay falta, un goce que no tiene límites, donde se niega la castración. Qué hubieran podido hacer Simón y Mikael si hubiesen sido apalabrados por el discurso capitalista de hoy en día. Eric Laurent define a una época diciendo en palabras de Lacan "para definir una época habría de calificar…el modo en el cuál se goza en una época" y dira "una civilización produce su malestar y ese malestar mismo es su manera de vivir la pulsión".
Un discurso que hace un para todos y que no tiene en cuenta la singularidad del sujeto. Ahora bien, es tan diferente ese Totalitarismo que abarcó la época de la segunda guerra con este para todos del discurso capitalista. El psicoanálisis no debe ser indiferente a esta pregunta, debe inferir, debe molestar, debe hacer presente eso olvidado. Deberemos en palabras de Jacques Alain Miller dar el la de la sinfonía.
Ser una marioneta era una muestra de debilidad?, dice Jacques Alain Miller en su conferencia "El inconsciente y el cuerpo hablante": "La debilidad, por el contrario, es el embaucamiento de lo posible. Ser incauto de un real –lo que yo alabo- es la única lucidez al alcance del cuerpo hablante para orientarse. Debilidad – delirio – embaucamiento, tal es la trilogía de hierro que hace resonar el nudo de lo imaginario, de lo simbólico y de lo real." (Miller, 2015) . Ese resonar de Simón con el que pudo anudar aquello de lo real imposible de soportar.
Esas marionetas que hablaban y no decían, eran cuerpos inanimados, sin vida, eran vidas partidas…
El GRIPSI toma al acontecimiento más allá del HIV/sida y se enfoca en la subjetividad de la época. Uno de nuestros integrantes del equipo de trabajo ha destacado el significante discapacidad como acontecimiento de lo real. Qué se considera discapacidad? Según el marco legal argentino "Se considera discapacitada a toda persona que padezca una alteración funcional, permanente o prolongada, física o mental, que en relación a su edad y medio social, implique desventajas considerables para su integración familiar, social, educacional y laboral" (Ley 22.431,1981. Art. 2°).
Escuchar a un sujeto atravesado por el significante de la discapacidad, hecho carne en su cuerpo es connotar la irrupción traumática. Un hombre de 60 años recientemente diagnosticado como portador de Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA) relata la incomprensión que lo invadió al momento de escuchar al médico transmitirle el diagnóstico. Su cuerpo ya lo venía preanunciando a través de pequeñas limitaciones en los movimientos finos y continuas caídas.
Recordemos que la ELA o "enfermedad de Charcot" denominada así por haber sido descripta por primera vez por el famoso médico francés en 1869, es una enfermedad degenerativa de las neuronas motoras que evoluciona rápidamente paralizando el cuerpo, de manera tal que el pronóstico es desfavorable, llevando a la muerte por parálisis de los músculos que intervienen en la función respiratoria. La evolución de la enfermedad tiene tal celeridad que nuestro paciente no puede menos que decir que se ve "tomado por la parálisis" que "avanza alocadamente". Ya no puede calzarse los zapatos ni vestirse solo y realiza adaptaciones constantes en su casa para poder manejarse con un mínimo de autovalimiento. Los movimientos voluntarios le resultan cada vez más difíciles de realizar y la sensación es la de un cuerpo invadido por la parálisis a la manera de la "casa tomada" del cuento de Cortázar. Nada se puede hacer contra eso, más que "tratar de no enloquecer".
Freud refiere a lo traumático a una situación de desvalimiento del Yo vivenciada ante la acumulación de excitación que la instancia no puede tramitar. En este sentido el modelo sería el trauma del nacimiento (Freud, 1926, p. 155). Efectivamente, "lo esencial en el nacimiento, como en cualquier otra situación de peligro, es que provoque en el vivenciar anímico un estado de excitación de elevada tensión que sea sentido como displacer y del cual uno no pueda enseñorearse por vía de descarga. Llamemos factor traumático a un estado así, en que fracasan los empeños del principio del placer…" (Freud, 1932, p. 86)
Siguiendo a Freud, pensar la discapacidad supone pensar al trauma: ¿Cómo puede entenderse el estado de un sujeto que de un momento a otro ve sus capacidades reducidas, sus posibilidades tremendamente limitadas y sus proyectos truncados a raíz de algo que irrumpe en su vida? Y lo que irrumpe traumáticamente en su vida es la discapacidad en tanto pérdida de una función o funciones, de un órgano u órganos. El fenómeno del miembro fantasma resulta el mejor ejemplo del trauma inherente a la discapacidad puesto que presentifica una ausencia con una concomitante angustia y dolor en el sujeto que no pueden ser contrarrestados por el registro de lo simbólico.
Jacques Lacan amplía los términos tyche y automaton de Aristóteles entendiendo a la tyche como encuentro con lo real y automaton como el retorno, la insistencia de los signos. A la altura de este Seminario lo real es para Lacan lo que está fuera de lo simbólico, luego, en el Seminario 20 lo real será lo imposible (Motta, 2009, p. 4). La tyche es el encuentro fallido con ese real que se presenta bajo la forma del trauma.
Pensar en la discapacidad, implica pensar en el cuerpo. El cuerpo en tanto sustancia gozante y en tanto propiedad del sujeto tal como nos dice Miller es designado desde el lenguaje del Derecho: "habeas corpus, tu cuerpo es tuyo" (Miller 2013 p. 36). Parafraseando a Miller consideramos que el sujeto humano es un ser sometido al traumatismo de lalengua (Miller 2013 p. 47), "el sonido de lalengua jamás es armónico" lo traumático implica desarmonía y esa desarmonía jamás puede ser reparada, no puede ser curada, y por eso hace del sujeto un"discapacitado de lalengua"
De la misma manera, la discapacidad instalada en un sujeto tampoco puede ser curada, no puede ser anulada y por eso se tratará entonces de hacer algo con lo crónico. Siguiendo el ejemplo de Joyce, que hace de su traumatismo una obra (el sinthome), la persona afectada de una discapacidad pueda llegar a construir un discurso que atraviese la discapacidad.
Ser portador de lo crónico es ser habitado por algo de lo real que puede ingresar al registro de lo simbólico; es vivir una vida partida por un acontecimiento disruptivo, un acontecimiento de lo real que marca un antes y un después. Hacer con ese real, con ese incurable que es la discapacidad, será la apuesta del psicoanálisis
Este punto se acerca al concepto de lo ominoso en Freud, aquello que resulta innombrable, aquello que aparece en lo real e imposible de soportar. Por lo tanto surge un cuestionamiento hacia el cuerpo. Aquí aparece Lo Incurable, entonces, dónde se soporta? Cómo hacer con lo incurable? Para esto debemos entrar en la relación inconsciente-cuerpo.
También aquí podemos situarnos en la relación con el Otro. Ya que la manera en que sea tomada esta discapacidad por el Otro y por los otros influirá en el sujeto. Esta mirada del Otro le dará un significado a la imagen propia del cuerpo. Influirá en la capacidad de hacer soportable esto que aparece en lo real.
La discapacidad sería entonces un obstáculo para saber hacer con lo real?
Podemos pensar Vidas Partidas desde los Padres y desde los Niños:
En relación al niño a pesar de ser quien vive con esto, de ser parte de sí, por lo tanto no hay un antes y un después; se puede pensar "partir" como una imagen partida, como diferencia, una diferencia que comienza a surgir-aparecer a partir de la inserción en lo social, del contexto, de los otros. Este sujeto que está ratificado por el Otro de la palabra. Es decir, hay una imagen que se genera dentro del círculo familiar como normalidad, como cotidianeidad pero al relacionarse con sus pares (escolaridad) comienza a notarse la diferencia, aquí se marca lo diferente, lo extraño del cuerpo, entra en juego el imaginario social, las creencias culturales en relación a la discapacidad, a la falta, aquello que molesta.
Aquí también se puede pensar el certificado de discapacidad como una marca instaurada, sellada, la presencia constante de la falta, de la desigualdad. Para tapar esto generalmente se suelen utilizar los psicofármacos, como una solución rápida, suele tranquilizar al colegio, a la familia. Pero esto no se puede tapar ya que aparecerá por otros lados. Por eso desde la labor del psicólogo en las escuelas, como acompañante, en realidad se apunta a la inclusión más que a la integración.
Poniendo el acento en los padres, se habla de una vida partida, ya que primero genera una cierta responsabilidad – culpabilidad al concebir un hijo con discapacidad. Aquí deben aprender a como manejar esto, como soportar lo incurable. Existe un antes y un después en la vida de la madre, en el deseo puesto en ese hijo, en el ideal que acontece al nacimiento, en el imaginario; y un después del acontecimiento, de un hecho real, de aquello impensable, de una falta real. Soportar aquello incurable, soportar la falta, la imagen intolerable.
Se podría pensar al psicoanalista con niños como áquel que viene a favorecer la función del escabel?: "los escabeles están allí para producir belleza porque la belleza es la defensa última contra lo real". El analista intenta encontrar la forma de soportar este real. Actúa de intermediario entre lo inconciente y lo real, para que aquello externo sea más soportable, para que exista una especie de "filtro" de "amortiguador" entre el niño y el otro. Intenta generar o poner a su alcance las herramientas para que este niño pueda saber hacer con su discapacidad. Interviene en la creación del lazo social. Desde la palabra, desde el juego, utilizando diferentes herramientas, apunta a dar otro sentido a lo que es dicho, dar otro sentido a esa discapacidad; posibilitar ser a lo que no es. Ya que aquí no se trata de "curar" un síntoma, se debe intentar hacer establecer un soporte, intentar tolerar lo incurable.
"El cuerpo se muestra apto para figurar, como superficie de inscripción, el lugar del Otro del significante. A partir de Hay-lo-Uno, el cuerpo aparece como el Otro del significante, en tanto que marcado, en tanto que el significante hace en él acontecimiento, este acontecimiento de cuerpo que es el goce, aparece como la verdadera causa de la realidad psíquica".
Hacerse un cuerpo. El niño es hablado. Qué ocurre cuando las prácticas médicas invaden este cuerpo antes de que haya podido formarse? Que ocurre cuando este sujeto está atravesado por la medicina antes del cariño de la madre? Qué ocurre cuando hay una hiancia entre esta unidad madre-hijo?
"Lo imaginario es el cuerpo. El cuerpo aparece como imagen, imagen en el espejo. La construcción borronea acentúa que como el cuerpo participa primero en la economía del goce, es a través de su imagen. El cuerpo condiciona todo aquello que el registro imaginario aloja de representaciones, significado, sentido y significación y la propia imagen del mundo. Es en el cuerpo imaginario donde las palabras de la lengua hacen entrar las representaciones, que nos constituyen un mundo ilusorio a partir del modelo de la unidad del cuerpo. "Entonces ¿qué ocurre cuando este cuerpo se encuentra marcado, en falta, obstaculizado frente a lo real?
Así hemos tomado el vector actual de investigación del GRIPSI: lo crónico.
Puesto que más allá de lo real, se verifica que lo crónico en el cuerpo tramita las mismas variables subjetivas de desesperación, rechazo, aceptación y atravesamiento. Estas variables humanas del dolor finalizan, la mayoría de las veces con un saber-hacer. Otras, en cambio, permiten que lo real aplane de modo absoluto al deseo y es cuando el goce con toda la opacidad que lo caracteriza, provoque en la vida misma un quiebre haciendo significantización en una vida partida.
Lo real deviene en Lo crónico y éste en Lo incurable, un debate posible que surge de la convocatoria de esta Jornada del CICDEBA.
Este pasaje a Lo incurable es la apuesta del Psicoanálisis puesto que con ello existe una garantía de saber-hacer.
BIBLIOGRAFÍA
- Aguado Díaz, Antonio León. Historia de las deficiencias. Colección "Tesis y Praxis". Escuela Libre Editorial. Fundación ONCE. Madrid 1995.
- Argentina. Ministerio de Salud de la Nación. Ley 22431 Sistema Integral de Protección de los Discapacitados. Buenos Aires. 1981
- Asamblea General de las Naciones Unidas. Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad. 2006
- De Lorenzo García, R. El futuro de las personas con discapacidad en el mundo. Desarrollo humano y Discapacidad. Fundación ONCE. Ediciones del Umbral. Madrid 2003.
- Freud, Sigmund. Inhibición, síntoma y angustia (1925). Vol 20. Editorial Amorrortu. Buenos Aires. 2008.
- Freud, Sigmund. Nuevas conferencias de introducción al psicoanálisis. 32° conferencia Angustia y vida pulsional (1932). Vol 22. Editorial Amorrortu. Buenos Aires. 2008
- Lacan, Jacques. Seminario 11 Los cuatro conceptos fundamentales del Psicoanálisis. Paidós. Buenos Aires. 1987.
- Miller, Jacques-Alain. Piezas sueltas. Paidós. Buenos Aires. 2013.
- Miller, J. A. (2015). El inconsciente y el cuerpo hablante. REVISTA LACANIANA DE PSICOANÁLISIS Nº 17, 21-32.
- Motta, Carlos Gustavo, Lo Real. Publicación del Centro de Estudios Superiores en Psicoanálisis y Psiquiatría. Buenos Aires. 2009.
- Motta, Carlos Gustavo. Psicoanálisis y sida. Ed. Aulas y Andamios. 4 edición. (2014).
- Motta, Carlos Gustavo. Las películas que Lacan vio y aplicó al psicoanálisis. Ed. Paidós. (2013).
- Organización Mundial de la Salud. Clasificación Internacional del Funcionamiento, la Discapacidad y la Salud (CIF). Versión para la Infancia y la Adolescencia. 2001.
- Palacios, A. y Romañach, J. El modelo de la diversidad. La bioética y los derechos humanos para alcanzar la plena dignidad en la diversidad funcional. Diversitas, Madrid, 2006.
- Unamuno, Miguel de (2014). Del sentimiento trágico de la vida. Buenos Aires: Losada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario