sábado, 25 de enero de 2020

Contra la violencia y la crueldad



Texto descriptivo para personas con discapacidad visual:
*ilustración pintura Los fusilamientos del 3 de Mayo de Francisco de Goya.
En la imagen se ve un pelotón de fusilamiento ejecutando a varios hombres entre quienes sobresale en el centro de la imagen un hombre de camisa blanca, mientras las siguientes víctimas de ejecución esperan horrorizadas a su lado cubriéndose los rostros*



Pareciera que estamos en una época de transición de modelos y es innegable que el feminismo ha venido a conmover los cimientos del patriarcado.
Por estos días se escucha un reclamo social generalizado de justicia en virtud del aberrante hecho de Villa Gesell. Pero lo que me resulta llamativo y contradictorio es que en ese inmenso grupo en el que está incluida prácticamente toda nuestra sociedad y que pide justicia, aparezcan voces que expresan la pretensión de que los asesinos "reciban su merecido" en la cárcel en forma de sometimiento, incluso sexual, por parte de los internos con los que allí se encuentren. O sea, se condena la violencia contra el inocente y se la promueve contra el culpable. Hay allí una contradicción atroz.
Por otra parte, en esta expresión de "darles su merecido" queda claro de que no se trata de cualquier castigo, sino de uno destinado a hacer mella en la supuesta masculinidad de los implicados quienes serían así despojados de los atributos de actividad, fuerza y virilidad para ser ubicados en el supuesto lugar femenino de subyugamiento. Hay en estas expresiones una escala de valores que relaciona lo masculino con el "macho" que se impone y lo femenino con lo subyugado (escuché por ejemplo "en la cárcel le van a poner polleritas"). Esa idea desvalorizante es la que se resume en el insulto "¡¡maricón!!". El maricón es el antimacho.
En relación a esto ayer mi hijo menor, de 7 años, escuchó la palabra "maricón" y me preguntó qué significaba. Me puso en un aprieto, como suelen hacerlo los chicos. Aclaro que él está al tanto de que existen parejas homosexuales porque las ve asiduamente y las considera naturales. Ante su pregunta le dije "se dice que alguien es maricón porque tiene miedo" (recordando el axioma de que el maricón es el que "no se la banca", el cuento El Marica de Abelardo Castillo es muy elocuente al respecto). Y la respuesta de él me dejó atónito: "pá, entonces somos todos maricones, si todos le tenemos miedo a algo". Y tiene razón!
Si pretendemos hacer un mundo donde exista mayor respeto y responsabilidad y eliminar la segregación, vale decir construir un mundo que nos incluya a todos, no podemos sostener la violencia y crueldad ni siquiera para el culpable del peor de los delitos. Por supuesto que el hecho absurdamente doloroso de la muerte de un joven inocente indigna terriblemente, pero no sería favorable a la construcción de una sociedad más pacífica, inclusiva y equitativa promover la violencia sobre nadie, ni siquiera sobre sus delincuentes. Nos tocará entonces como miembros de una sociedad basada en valores de no violencia, no promoverla jamás, ni con nuestros hijos e hijas, ni contra parejas, amigos, conocidos, desconocidos, ni contra el peor de los delincuentes.
No parece haber otra manera más que la de eliminar la propia violencia hasta de las expresiones del lenguaje y confrontarnos con nuestro propio límite tras miles de años de una cultura que nos ha enseñado el darwinismo social, esa idea de imponerse a través de la fuerza de la lucha, que hasta aquí solo ha generado exclusión y sociedades intolerantes y en permanente guerra contra los otros que no son yo, que no son como yo, contra lo distinto.
Pareciera que otra idea viene de la mano del movimiento feminista pero también de otros colectivos que representan minorías y que bregan por la inclusión (como por ejemplo el colectivo de personas con discapacidad), idea que viene cobrando fuerzas e instalando una lógica donde no habría lugar para la crueldad y la violencia que son herederas de ese darwimismo social que, encarnado en nuestra cultura lleva a que algunos pidan ejercer sobre un sector de la sociedad la opresión y el sometimiento que se pretende eliminar de toda la sociedad.
Silvio Rivero

La "grieta" excluye, la moneda incluye




El concepto de grieta fue acuñado en nuestro país por el periodista Jorge Lanata en un artículo de contratapa de Página 12 de 1989. Pero comenzó a ser de uso popular en 2008 con el conflicto entre el Gobierno y el campo por la Ley 125 y se afianzó definitivamente como concepto en 2015 en época pre electoral. A mi criterio, resulta una construcción interesante y efectiva para el propósito que fuera creada. Se apela a esta imagen de grieta para graficar la división entre habitantes de nuestro país en tanto representantes de distintas posiciones políticas. La idea de grieta supone entonces una división, pero alberga también la idea de solución, ya que si hay una grieta es porque alguna vez se produjo y por lo tanto así como se produjo, se puede deshacer. Tengamos en cuenta que una grieta es un accidente natural, una falla (por ejemplo la famosa falla de San Andrés). Una idea interesante porque, al tiempo que se habla de grieta, vale decir, de un accidente natural, de algo que se genera a expensas de la acción humana, se habla también de "subsanar la grieta", lo que implica acción humana sobre ella para hacerla desaparecer. Una empresa difícil por lo que surge la pregunta: ¿será posible unir los bordes de dicha grieta?
De que existe una división de posiciones políticas y sociales no hay dudas, pero no es nueva, viene de Unitarios y Federales, Peronistas y Antiperonistas.
Pensando en esto quizás la imagen para representar esta división no sea una grieta que es un accidente natural como hemos dicho más arriba, sino otro elemento pero de la cultura, algo creado por el hombre, como puede ser una moneda. Representarnos la diferencia de esta manera nos permite imaginarnos un todo de dos caras que coexisten. Desde esta mirada no tendría sentido insistir en "terminar con la grieta", en terminar con las diferencias, sino que la apuesta, si se quieren tranquilizar las aguas, podría ser la de convencer, persuadir (diría Raúl Alfonsín) al ciudadano de que, para mantener el equilibrio del todo, es necesario sostener aún la cara de la moneda a la que no se pertenece. Soy consciente de que la imagen probablemente resulte extraña, pero ¿no es acaso eso lo que intenta el Gobierno actual cuando habla de "solidaridad"? ¿No es acaso, convocar a quienes están de un lado de la moneda a ayudar a quienes están del otro? Es por eso precisamente que, desde el lado que tiene que colaborar con el sostén del otro, aparece la resistencia ante esta propuesta y aparecen también las consignas totalizantes desde ese lado de dicha moneda, expresadas por ejemplo en el "todos somos el campo", consignas que intentan convencer al todo de que no existe más que una cara de la moneda, que es justamente la que habita quien enuncia la frase "todos somos...".
Considerando asi las cosas quizás habría que aceptar que hay dos caras que no se encuentran más que un borde común pero que coexisten formando un todo que es necesario equilibrar aunque para eso algunos deban resignar algo en beneficio de los demás, a sabiendas de que, en última instancia, eso beneficiará al todo, incluyéndolos también a ellos. La grieta excluye, la moneda incluye.
Silvio Rivero

La locura de matar al diferente





En el cuento "El niño proletario" (1973) Osvaldo Lamborghini relata magistralmente la muerte cruel, sádica y sin sentido de un niño pobre a manos de niños de clase social superior. La obra se constituye así en una crítica feroz a la burguesía que puede llevar al lector a un terreno insoportable por lo descarnado y revulsivo del texto.
Los hechos espantosos de Villa Gesell que terminaron en la muerte de un joven a manos de una manada asesina, me trajeron ese cuento a la memoria. Pero no por equiparar exactamente ambos sucesos, sino porque en ambos subyace una posición que Sigmund Freud nos supo advertir en "El malestar en la cultura" (1930). Allí Freud nos habla de lo difícil que resulta esa empresa llamada "amor al prójimo" ya que a ella se le contrapone otra fuerza poderosa. Dice Freud: "el prójimo es una tentación para satisfacer en él la agresión, explotar su fuerza de trabajo sin resarcirlo, usarlo sexualmente sin su consentimiento, desposeerlo de su patrimonio, infligirle dolores, martirizarlo y asesinarlo".
En Gesell diez pibes de clase acomodada matan a uno de clase trabajadora.
Más allá de las características que estimule el deporte que los asesinos practican, características que hoy puso de manifiesto de manera autocrítica y valiente Tomas Hodger, un rugbier rosarino que dijo "nos creemos el ejemplo y nos creemos moral y físicamente superiores al resto"; más allá de eso, creo que hay una responsabilidad más colectiva que excede a la cofradía del rugby.
Cómo es que se genera tanta crueldad, tanta saña, tanto odio que termina en el espanto de Gesell tan similar al cuento de Lamborghini, por lo impiadoso?
Cuánta responsabilidad tenemos todos como sociedad en esto?
Cuántas veces esos chicos, hoy convertidos en homicidas, habrán escuchado en los medios de comunicación definir despectivamente al humilde como "negro", "vago", "choriplanero"?
Cuántas veces habrán visto la violación a la ley encarnada en empleadas domésticas trabajando "en negro" en sus casas?
Cuántas veces habrán escuchado la estigmatización cuando alguien decía: " se embarazan para cobrar la asignación por hijo", "no trabajan porque no quieren" o "el dinero de las asignaciones se va por la canaleta de la droga y el alcohol"?
Cuánto hace que esos chicos vienen aprendiendo el desprecio al diferente, al humilde y al vulnerable?
Y cuanto hace también que vienen forjando músculos de machitos y la firme convicción de que "son un ejemplo, moral y físicamente superiores al resto" tal como lo expresa Hodger?
Entonces, podemos asombrarnos tanto de ver los monstruos que creamos?
Vivimos en el discurso del odio (en esa maldita grieta inventada para beneficio de algunos) que como maleza invade todo, hasta a nuestros propios hijos y cuando su fruto amargo madura en locura sádica de manada, nos asombramos.
Es hora de intentar que ese discurso de confrontación y dominio, tan patriarcal por otra parte, vaya siendo reemplazado por un lazo social un poco más amoroso que exige ese respeto a la diferencia que las feministas conocen bien. Así al menos la muerte tan absurda de Fernando nos obligará a ser mejores.
Silvio Rivero

domingo, 19 de enero de 2020

Nisman, Aquiles y la tortuga


Uno de los aspectos que más me llamó la atención del documental de Nisman fueron los puntos de absurdo que saca a la luz, tanto al hablar de AMIA como de la muerte del fiscal. Tomo solo dos en relación a la causa AMIA.
En los primeros capítulos el agente asignado por el FBI para colaborar con la investigación entre 1997 y 1998 dice que a él lo sorprendió que se buscaran pistas para probar una conclusión determinada de antemano, en lugar de encontrar pistas que llevasen naturalmente a un resultado. O sea, se sorprende por la inversión del proceso investigativo (ver fotos abajo👇). Vale decir, se determinó que el responsable del atentado fue Irán y luego se buscaron pistas que condujeran a eso, como por ejemplo la famosa combi y su conductor visto por una sola testigo.
Al final del documental Luis Moreno Ocampo también muestra lo absurdo presente desde los inicios del proceso de investigación (ver fragmento del documental al pie del texto 👇).
En el documental y ya en la causa Nisman, se siguen acumulando absurdos, como la escena de la marcha de los fiscales que caminan abrazados bajo la lluvia pidiendo una justicia que ellos mismos tienen que garantizar. O la detención de Lagomarsino porque le prestó un arma al difunto y eso lo hizo "partícipe necesario del homicidio de Nisman", aunque no hay pruebas de que ese homicidio haya existido ni de quienes lo perpetraron. No hay homicio probado, pero aún así hay un detenido que participó de ese homicidio que no está probado que haya existido. Y así los absurdos se suceden. Y eso que en el documental no se menciona la hipótesis que escribe Eduardo Van Der Kooy en Clarín el 22 de febrero de 2015, cuando dice que a Nisman lo asesinó un "comando venezolano iraní con adiestramiento en Cuba" (pongo fecha para que googleen Clarín de ese día y lo verifiquen, no es delirio de quien esto escribe). Según esta hipótesis, se dijo después, que los asesinos serían unos equilibristas, trapecistas y de dimensiones diminutas para poder entrar al baño, ponerle el arma en la mano a Nisman, tirar del gatillo y al mismo tiempo saltar afuera del baño para no interponerse en el trayecto de las salpicaduras de sangre que no fueron obstaculizadas en ningún sector de su trayectoria, todo eso sin dejar huellas en ninguna superficie (convirtiéndose así en el primer crimen perfecto de la historia). Para explicar eso en los medios se decía que los asesinos eran una especie de ninjas. Creo que el director del documental mencionado no debe de haber querido incluir esta hipótesis porque le habrá parecido demasiado increíble. Así como por suerte y en este caso por cuestiones cronológicas, tampoco pudo incluir la hipótesis de Federico Andahazi expresada ayer en TN, donde dijo que no fue un suicidio porque el fiscal era coqueto y "nunca podría haberse suicidado en calzoncillos".
Parece el guión de una película de los hermanos Marx pero lamentablemente es un hecho real que escribirá otro capítulo en estos días con una nueva conmemoración de la muerte y seguramente el resurgimiento de esas disparatadas teorías.
Defender la teoría del asesinato implica -hay que reconocerlo- un importante esfuerzo de creatividad que, en lo personal, se me ocurre similar al de Zenón de Elea. Como ustedes seguramente sabrán, sino les cuento (con el permiso de los filósofos y profesores de filosofía) Zenón era un filósofo discípulo de Parménides, otro filósofo de la Antigua Grecia quien, en oposición a Heráclito postulaba que la idea del movimiento era una ilusión de los sentidos. Para apoyar a su maestro, Zenón elabora una serie de aporías entre las que están, por ejemplo, la de Aquiles y la tortuga. Brevemente (porque en Facebook el tiempo es tirano) esta dice que en una posible carrera entre Aquiles y una tortuga, aquel jamás alcanzaría a esta. Como es eso? Bueno, si Aquiles le da cierta ventaja a la tortuga al momento de iniciar la carrera, cuando Aquiles recorra una distancia determinada, en ese mismo tiempo, la tortuga aunque mucho más lento, recorrerá también una distancia aunque por supuesto, menor. Al razonar así se concluye que, a cada distancia que avanza Aquiles en un lapso de tiempo determinado, le corresponde también una distancia de avance a la tortuga, aunque mucho menor. Por lo tanto, siempre la tortuga estará adelante de Aquiles aunque sea por un espacio infinitamente pequeño.
En el caso de Nisman, como en las aporías de Zenón, hay un forzamiento de la lógica. No existe un solo elemento de prueba para hablar de asesinato, pero aún así y en contra de toda lógica se sostiene que lo mataron. Se califica la muerte de asesinato, se ubica un culpable y luego se buscan pruebas para incriminarlo. Como no se encuentran esas pruebas (básicamente porque no se puede probar asesinato), y tal como Zenón para negar la evidencia del movimiento, se inventan teorías absurdas que expliquen el asesinato inexistente.
Ojalá la justicia pueda darle al absurdo el lugar que le corresponde y pueda cerrar el caso, aunque es seguro que esas hipótesis seguirán existiendo en el imaginario de cierto sector que sostendrá siempre y contra toda lógica, que las tortugas son más veloces que los aquiles.






De chanchos y "cagadores argentinos"

No se trata sólo del chancho que tiraron de un helicóptero en Punta del Este. Esto se suma a las declaraciones de Susana Giménez proponiendo gallineros, hoy ratificadas por ella misma. Se trata de las declaraciones de Miguel Ángel Pichetto burlándose de la tarjeta alimentaria y negando el hambre. Se trata de los "politicos-empresarios" generadores de pobreza dando clases de como generar riquezas. Se trata de funcionarios de un gobierno vacacionando alegremente, mientras la población sufre las consecuencias de las políticas que implementaron (el doble de pobres y desocupados, incremento astronómico de deuda externa, 300% de inflación, etc).
Qué tienen en común estos hechos? Todos son expresiones de al menos una porción de una clase social dominante que se jacta de hacer lo que le viene en ganas, cuando le viene en ganas, con una impunidad que le es propia. Se caracterizan por la falta de respeto a todo lo ajeno a su mundo y por el desprecio hacia todo lo que huela a pueblo.
Por eso estuvo acertado hoy Pepe Mujica cuando le advirtió al nuevo presidente de su país que no lleve a "cagadores argentinos" a invertir en su país. Se refería a este tipo de gente. Estos son los "cagadores argentinos". Son los mismos de siempre y se encargan de demostrarlo toda vez que pueden. Tirar un chancho es una forma más de decir lo mismo de siempre: me garco en todo. Mujica lo captó muy bien y trata de proteger a los suyos de esa gente, ojalá nosotros también comencemos a hacerlo.

Ilustración matanzadigital.com.ar

WOS


Escuho a Valentín Oliva, más conocido como Wos y el futuro me da esperanzas.
Poesía violenta como la época exige. La visión romántica naif no tiene lugar. El amor se presenta con dureza de metal y las palabras cortan ("perdón mi amor si esto te dolió, quise morir de amor pero no me salió" Andrómeda), aunque a veces acarician (¨te vi y perdí el calibre, abrí la jaula y me olvidé de como ser libre. Con vos es todo más simple, te vi un rato y se me fue lo triste. Había un lugar en tu cama y me volví un okupa, el sol en la ventana y me hiciste de lupa. No sé de quien es la culpa". Okupa). Lo social, muy presente al punto que Tristán Bauer en su reciente film "Tierra arrasada" usa el tema Canguro ("no para de toser trabajando doce horas, cobra dos monedas al mes pa' mantener cuatro personas, y no hables de meritocracia, me da gracia, no me jodas que sin oportunidades esa m.. no funciona". Canguro)
Un rapero de 20 años fogueado en duelos de freestyler donde ha ganado y perdido, afilando lengua y estilo. Un artista que va de la pregunta existencial a la realidad social pasando por el amor, la muerte, la fama, el dinero; siempre con rima justa, una cuota cítrica de cinismo y destellos de verdad. Aplausos!!

De gente peligrosa


En el libro De la estupidez a la locura, en uno de sus artículos Umberto Eco cita increíbles frases pronunciadas por George Bush. Acá van sólo algunas.
POLÍTICA: "creo que estamos en un camino irreversible hacia más libertad y democracia. Pero las cosas pueden cambiar" (22 de mayo de 1998). "Sé que en Washington hay muchas ambiciones. Es natural. Pero espero que los ambiciosos se den cuenta de que es más fácil triunfar con un éxito que con un fracaso" (entrevista a la Associated Press, 18 de enero de 2001). "Uno de los denominadores comunes que he encontrado es que las esperanzas surgen en torno a lo que se espera" (Los Ángeles, 27 de septiembre de 2000).
CIENCIA: "Marte está esencialmente en la misma órbita...Marte está más o menos a la misma distancia del sol, lo que es muy importante. Nosotros tenemos fotos donde existen canales, pensamos es agua. Si hay agua, eso significa que hay oxígeno. Si hay oxígeno, significa que podemos respirar" (8 de noviembre de 1994). "Para la NASA, el espacio aún es alta prioridad" ( 5 de Septiembre de 1993). "El gas natural es hemisférico. Me gusta llamarlo hemisférico en la naturaleza, porque es el producto que podemos encontrar en el vecindario" (Austin, 20 de diciembre de 2000). Sé que el ser humano y los peces pueden convivir pacíficamente" ( Saginaw, 29 de septiembre de 2000).
En la misma línea pero ya en nuestra realidad social encontramos, por nombrar solo un par de ejemplos, a exponentes de notoriedad pública como Susana Giménez con su propuesta de instalar gallineros para sacar a millones de habitantes de la pobreza, y ya en el campo de la política a la diputada Amalia Granata quien entre incontables frases absurdas ha dicho en plena campaña "no les prometo nada porque no les voy a poder cumplir". Y con esa frase, ganó!!
Ante tal muestra de disparate empiezo a sospechar que lo de la meritocracia es puro cuento, a no ser que exhibir ignorancia e insensibilidad sea un mérito del cual no estaba enterado. Evidentemente hemos naturalizado tanto el absurdo que, en el ámbito público se expresa casi de manera cotidiana. Y esa naturalización quizás se deba a que, como en esas fotos con perpsectiva cambiada, sabemos que es imposible que eso que se dice entre en el campo de la lógica, pero aún así, no podemos dejar de escuchar sin que nos cause cierta sensación de desconcierto y diversión. Pero a diferencia de esas fotos, la intención no es inofensiva, sino que en estos casos el discurso de estos personajes intenta crear un nuevo sentido común siendo por eso, peligrosos.

"Su" gallinero

Si pensamos que el inconsciente tiene la costumbre de colarse en las palabras dejando expuesto a quien las dice, quizás podríamos ubicar en los dichos de Susana Giménez algo de eso.
A efectos de diversión (o no tanto) me pregunto por qué como modelo de solución al problema de la pobreza se le ocurrió la imagen del "gallinero". Y enseguida se me ocurre pensar que tal vez no se trata de una imagen cualquiera sino más bien de una metáfora surgida a expensas de su intención, claro. Recordemos que, hace unos días, la Sra Giménez, un tanto pasada de copas y enojada por el 30% de impuesto a los gastos en dólares, sacó de la galera de su boca una frase preciosa: "hay que enseñarle a la gente a tener gallinas en el gallinero, qué se yo, cosas..."
Y justamente del gallinero se trata, o como se dice en el campo, de "la ley del gallinero", concepto darwinista por excelencia. Como uds sabrán, en el gallinero las gallinas duermen de acuerdo a un orden jerárquico. Las de mayor jerarquía social se ubican en los palos superiores y las de menor jerarquía en los inferiores. La consecuencia de esto es que, con perdón de la expresión escatológica aquí necesaria, las de mayor jerarquía defecan todas las noches sobre las de menor rango.
Entonces, saliendo del gallinero y volviendo a nuestro zoológico, es esperable que a alguien que en más de una oportunidad abogó públicamente por el darwinismo social, se le presente, entre copas y enojo, la imagen metafórica del gallinero como una auténtica filosofía de vida que tiene como máxima perjudicar a los que están abajo.

NISMAN Y POE




El documental "Nisman, el fiscal, la presidenta y el espía" resulta interesante. Por un lado presenta entrevistas que sustentan alternadamente una y otra hipótesis sobre la muerte del fiscal en un intento de dar respuesta a la causa, pero por otro lado va y viene en el tiempo entremezclando con demasiada frecuencia el caso del ataque a la AMIA y el de la muerte de Nisman, lo cual puede confundir al espectador poco interiorizado (pienso en los espectadores extranjeros).
Creo que no llega a contextualizar los hechos en el panorama político más amplio en el que se insertan, ya que el derrotero del documental arranca en 1994 con el ataque a la AMIA y llega hasta 2017. En ese lapso pasaron gobiernos de distintos signos políticos con una incidencia sobre la causa que no siempre queda clara. Pero esta dificultad creo que se debe a la compleja realidad política criolla que no ofrece continuidades sino más bien quiebres y grietas, más que a la pericia del director quien por algo dijo que había sido este el documental más difícil de su carrera.
Lo que si queda claro en el documental es que AMIA, a pesar del deseo de Cristina Fernández expresado en ocasión de la apertura de sesiones legislativas de 2013, de que no sea una pieza más en el ajedrez geopolítico mundial, termina siéndolo. Pieza que nos ha causado un enorne dolor como pueblo. Esta visión del mundo como tablero de ajedrez de potencias militares y económicas se confirma, sobre todo a la luz de la reciente muerte del General iraní Qasem Soleimani a manos del ejército norteamericano. De alli que el Memorándum de entendimiento con Irán, que proponía que la justicia argentina, ante la imposibilidad de extradición, vaya a Teherán a tomar declaraciones a los sospechosos de la voladura de la AMIA, haya sido un elemento que se combatió desde un sector y se favoreció desde otro. Las políticas internacional y nacional se entremezclan en este punto, intereses extranjeros y nacionales se confunden.
Queda claro también que nuestra justicia no tiene una venda puesta y funciona o disfunciona de acuerdo a intereses que la exceden. Esto se evidencia cuando se presentan las conexiones entre los servicios de inteligencia y jueces y fiscales y sobre todo cuando se muestra la dependencia de Nisman respecto de Stiuso y del falso agente Allan Bogado.
Quedan claros también los vínculos políticos evidenciados en los contactos del fiscal y los titulares de los diarios de ese momento.


Queda todo tan claro que no se puede menos que ver que hay intereses que pretenden que las causas (AMIA y Nisman) sigan envueltas en un halo de sospecha. Como en el cuento de Poe, La carta robada, en el caso Nismam, la verdad está ahí a la vista de todos pero, a diferencia del cuento, hay un sector que la busca donde sabe que no está, solo para asegurarse de no encontrarla.

Silvio Rivero