jueves, 24 de diciembre de 2020

EDUCACIÓN PÚBLICA SOLO PARA QUIENES NO PUEDAN PAGAR LA PRIVADA

En un año en el que queda claro la importancia fundamental del rol del Estado para garantizar salud, educación, trabajo, funcionamiento de la economía, etc; el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires disminuye en un 6% su presupuesto en Educación para el año próximo, pero aumenta en un 35% su presupuesto en Justicia.

¿Por qué ocurre eso?

El legislador porteño Leandro Santoro  lo explicó muy claramente en su última alocución en la Legislatura en sesión en el que el oficialismo de JxC tiene mayoría. La justicia porteña funciona como brazo politico del gobierno de la Ciudad. https://www.pagina12.com.ar/311225-leandro-santoro-termina-siendo-la-caja-sucia-de-la-politica-

Una nueva prueba de este rol se mostró ayer vía un fallo del Tribunal Supremo de Justicia de la Ciudad (TSJ) quien, ante una demanda presentada por una madre en 2018 a raíz de la negativa de vacante a su hijo en escuela pública -recordemos que  el artículo 24 de la Constitución de la Ciudad exige garantizar la educación a los ciudadanos- y luego de dos años de que la demanda pasara por diversas instancias judiciales hasta llegar a la superior, o sea el TSJ, este dispone que "solo pueden exigir la obligatoriedad de las vacantes al gobierno de la Ciudad quienes no puedan afrontar una cuota de un establecimiento privado."

Se da así el grave hecho de que el TSJ falla en contra de lo que expresa la misma Constitución de la Ciudad. https://www.pagina12.com.ar/313407-escuelas-portenas-solo-podran-reclamar-vacantes-quienes-no-p

Queda claro entonces, en este hecho, la necesidad del gobierno de la Ciudad de destinar tanto dinero a la Justicia. Es la forma de frenar cualquier juicio que contra el Estado de la ciudad pueda hacer quien se vea damnificado por las medidas de gobierno. Se replica así en la ciudad lo que el macrismo hizo a nivel nacional cuando fue gobierno y que ha dejado como saldo -entre otros y vía lawfare- una serie de presos políticos que esta Navidad volverán a pasarla detenidos.

Si la Justicia no se separa del poder politico seguiremos a merced de unos pocos que incluso pueden no cumplir con la ley  avalado por una justicia que tampoco la cumple. 

El mundo del revés, o mejor dicho, la ciudad del revés.


Silvio Rivero




lunes, 21 de diciembre de 2020

"ROMPAN TODO". Historia de la música, musicalización de la historia.

La miniserie se emite por Netflix en 6 capitulos. Dirigida por Picky Talarico y producida por Iván Entel y Gustavo Santaolalla.

Con múltiples testimonios de músicos e imágenes de archivos, recorre la historia del rock latinoamericano. Arranca  desde los orígenes. En el norte con Ritchie Valens en México -a partir de su  reversión de La Bamba en 1957- , en el sur con Los Shakers, esa legendaria banda uruguaya de los hermanos Fattoruso que compone la explosiva "Break it all", canción que muchos creen de The Beatles y que da nombre a la mini serie (https://youtu.be/D6VqPh9vP74).

A partir de allí se suman testimonios de integrantes de bandas y de solistas entre quienes están Charly García, Luis Alberto Spinetta, Fito Páez, El Tri, Aterciopelados, Los Prisioneros,  Molotov, Café Tacvba, La Ley, Julieta Venegas, León Gieco, Control Machete, Los Fabulosos Cadillacs, Lito Nebbia, Mon Laferte, Billy Bond, Andrés Calamaro, Miguel Mateos y muchos, pero muchos más.

Más de 60 años de historia que no se agotan en el recorrido de las bandas que emergen aquí y allá sino que ofrece panorámicas socio políticas de los países de las que estas surgen: México, Uruguay, Chile, Colombia, Argentina y algo de España. El relato muestra la incidencia de los contextos sociales en el fenómeno cultural.

El recorrido es muy interesante, por varios motivos, pero rescato dos. Por un lado la historia está contada, directamente por quienes la hicieron y eso es maravilloso por la veracidad que le imprime. Y por otro lado es interesante también porque, dada la forma en que está contada, se la puede considerar tanto una historia del rock latinoamericano como la musicalización de la historia de Latinoamérica  y de la historia de cada espectador que seguramente sabrá encontrar en las canciones la banda sonora de distintos momentos de su vida.

Hermosa, emocionante y muy recomendable!


Silvio Rivero




domingo, 13 de diciembre de 2020

SOBRE EL PUNITIVISMO ANTI ABORTISTA


Por estos días me llamaron la atención algunas expresiones en contra de la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo. Sin ánimo de generalizar, se puede observar muchas veces, una posición punitivista en ellas.

Efectivamente se culpabiliza a la mujer adjudicándole incluso una condenable falta de previsión. Se niega así la interrupción del embarazo con el argumento de una conducta femenina (sólo femenina) reprochable,  lo que equivale a decir que la mujer se dejó llevar por el deseo sexual y allí están las consecuencias: el hijo no deseado que debería tener, aunque no quiera. 

Si bien la mayor parte de quienes sostienen estas ideas se consideran cristianos, su actitud está más alineada con el "ojo por ojo" del Antiguo Testamento que con el "si alguien te abofetea ponle la otra mejilla" o "quien esté libre de pecado, tire la primera piedra", del Nuevo Testamento. Un punitivisno que abreva en ese Dios cruel que puso a prueba a Abraham pidiéndole que sacrifique a Isaac y no en el Jesús que salva a la pecadora María Magdalena de la lapidación. Lejos de la compresión del drama del embarazo no deseado, cerca de la condena rápida del acto de abortar.

Entre los argumentos para culpabilizar y castigar a la mujer se encuentra también el de calcular el costo que tendría el aborto para el Estado en caso de convertirse en ley. Algo llamativo porque no existe ese mismo cálculo en relación a otros tratamientos por enfermedades derivados de, por ejemplo, el tabaquismo o el alcoholismo.

Pero en verdad no es raro que ocurra todo esto porque lo que crispa los nervios de quienes así se expresan -y que incluso tienen pensadores criollos como por ejemplo el escritor y politólogo Agustín Laje- es que no se trata tanto del aborto en sí, sino de la regulación de sexualidad y de los cuerpos. 

El punitivisno recae sobre el placer de la mujer. Es como si dijeran "si disfrutaste, pagá las consecuencias". Lo que se castiga es el deseo y lo que no se perdona es el ejercicio del derecho a elegir ser o no ser madre. Desde esta perspectiva no se toma la cuestión como lo que es,  un problema de salud -ya que los abortos existieron y existirán siempre independientemente de su legalización, pero serán seguros si se los legaliza- sino que se lo toma desde un aspecto axiológico, valorativo, pero bajo una moral punitivista. Los portadores de esa moral sólo pueden juzgar desde una posición superyoica. 

El psicoanálisis nos enseña que el superyo es esa instancia psíquica que culpabiliza, que mortifica sin límites, que puede ser muy cruel, muy feroz y que obliga siempre a más y más renuncia para satisfacerse. 

Juzgar desde esta posición lleva a hacer de la mujer que aborta, no alguien inmerso en circunstancias dramáticas, sino que hace de ella un mártir que debe resignarse a sufrir porque de esa manera lavaría ese pecado cometido. Y justamente contra esto va la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo. Ella viene a sacar a las mujeres de ese lugar de mártires que entregan su vida por el pecado cometido (ya sea en una clínica de aborto clandestina o convirtiéndose en madres sin desearlo), las sustrae de ese lugar de culpables para convertirlas en sujetos de derecho y de responsabilidad. No es lo mismo cometer un error que un pecado, el primero se enmienda y se asume, el segundo se expía con una penitencia que alguna autoridad impone a manera de absolución. El primero genera responsabilidad, el segundo engendra culpa ("pésame, Dios mío" dice el "Pésame"). Quienes controlan desde siempre a la Humanidad con este último elemento, no perdonan que el aborto "sea Ley", porque tendrá, amén del efecto de salud en los psiquismos y los cuerpos, un efecto liberador en las almas.


Silvio Rivero




jueves, 10 de diciembre de 2020

QUE SEA LEY!!


Recuerdo aún el dolor con que aquella mujer relataba su aborto, el movimiento del cuerpo buscando el apoyo justo en el sillón, la errancia de la mirada y las manos inquietas. El hecho tenía casi 40 años pero ella aún recordaba su cuerpo sobre la cama sucia, las luces colgando del techo, el olor a humedad, alcohol y lavandina, los ruidos metálicos de instrumentales y su miedo, su enorme miedo ese que volvía a sentir cuando hablaba en sesión. 

La vida de un analista está atravesada por relatos escuchados y los de las mujeres que han tenido que abortar son siempre muy dolorosos. Nadie pasa por un aborto sin recordarlo siempre. Eso no se borra y habita en el sujeto para siempre. Pero si a ese hecho tan doloroso se le agrega la condena de un Estado y de una sociedad, entonces el dolor es aún mayor.

No van a existir mayor cantidad de abortos por legalizar su práctica, así como no disminuirán por continuar siendo clandestinos. La ley no va a incidir en el número de abortos, lo dicen las estadísticas, pero también podemos decirlo quienes escuchamos el dolor ajeno. Afrontar una decisión de esta naturaleza es siempre muy difícil, se toma en la más absoluta soledad y asumiendo ineludiblemente toda la responsabilidad; pero si el Estado acompaña legalizándolo y garantizando la salud de la mujer, al menos esa difícil decisión no se pagará con la propia vida.

Por eso es tan acertado el lema "educación sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar, aborto legal para no morir"

Que sea Ley!!

Silvio Rivero








jueves, 3 de diciembre de 2020

3 DE DICIEMBRE DÍA INTERNACIONAL DE LAS PERSONAS CON DISCAPACIDAD: "UN DÍA PARA TODOS".



De acuerdo con los cálculos de la OMS, más de 1000 millones de personas —alrededor del 15% de la población mundial— tienen alguna forma de discapacidad.

Este año, la OMS se une a sus asociados bajo el lema «Un día para todos», con el cual se quiere reflejar la creciente aceptación de que la discapacidad forma parte de la condición humana. Casi todos nosotros experimentaremos una discapacidad temporal o permanente en algún momento de nuestras vidas. 


En virtud del día, nos encontraremos hoy en nuestra 2° Jornada Discapacidad e Inclusión para reflexionar sobre la temática.